El 7 de abril celebramos en nuestro instituto el Día de la Solidaridad, que suele coincidir con el final del segundo trimestre. Es una jornada en la que, mediante diferentes talleres y actividades, se intenta recaudar dinero con el fin de ayudar a las familias menos favorecidas. Todo empezó en el año 2010, en el que se produjo un devastador terremoto en Haití. El alumnado sugirió la idea de ayudar de alguna forma y se decidió organizar esta actividad, que se ha venido manteniendo año tras año para ayudar a las familias que lo necesitan. La jornada se convierte en una fiesta para todos los sectores que conforman nuestro instituto con la finalidad principal de desarrollar un espíritu solidario entre el alumnado, conseguir que comprendan las necesidades de los demás e intenten, en la medida de sus posibilidades, paliarlas.
Tras preguntar a diferentes alumnos y profesores qué es la solidaridad, podemos definirla como un valor o capacidad que tendría que estar presente en todo el mundo, ya que consiste en darse cuenta de que no solo existimos nosotros, sino que existen más personas a nuestro alrededor que necesitan ayuda. Una persona solidaria no espera recibir nada material a cambio de su esfuerzo, solo la satisfacción personal.
Durante las semanas previas al Día de la Solidaridad se organizó un concurso de logotipos. El elegido, realizado por Erika Ortega Carrasco, de 1º ESO, se estampó en las camisetas que todos los miembros de la comunidad escolar llevamos ese día (adquiridas para obtener fondos) y en la pancarta que el profesor de Tecnología, Pedro Muñoz, realizó para colgarla en la entrada del instituto.
En los días previos tuvieron lugar en el centro charlas con contenido solidario, como la de los Yayoflautas para 2º de Bachillerato o la de la alumna de este nivel, Liberia Serrano, sobre Amnistía Internacional, dirigida al alumnado de 3º de ESO.
A lo largo del día se desarrollaron múltiples y variados talleres y actividades, que contentaron a todos los participantes y dieron lugar a una jornada muy amena y entretenida, en la que alumnado y profesorado eligieron los que más se adaptaban a sus gustos.
La jornada comenzó con el tradicional y nutritivo desayuno ofrecido por el AMPA Zahorí.
Se instaló un mercadillo y una feria del libro en la que podían intercambiarse o adquirirse libros donados solidariamente. También estaban a la venta vídeos, discos y diferentes objetos. Entre ellos destacaban los jabones solidarios, elaborados la profesora Leonor Sánchez, del Departamento de Física y Química, en colaboración con el alumnado y los tutores de 3º y 4º de ESO. Aparte de recaudar el mayor dinero posible para un fin benéfico, el objetivo de esta actividad es reciclar el aceite usado, ya que este no se debe tirar, porque contamina el agua que llega a las depuradoras. Con este taller se ha conseguido reciclar treinta y seis litros de aceite usado a lo largo de dos meses. Los jabones se presentaron con frases solidarias en inglés, francés y castellano y fueron, como el curso pasado, un éxito de ventas.
A lo largo de la mañana tuvo lugar en el nuevo gimnasio del centro una exhibición de acrosport a cargo del profesorado y alumnado de Educación Física.
Se celebraron diferentes competiciones, como la de videojuegos y las de fútbol y voleibol, organizadas por la profesora Francisca Torrero y el Departamento de Educación física.
El alumnado que así lo eligió pudo participar en una gymkhana de realidad aumentada, preparada durante el segundo trimestre por los cursos de informática de primero de Bachillerato, dirigidos por su profesor, Sinhué Navarro. Los participantes, algunos de ellos disfrazados, debían buscar códigos QR que los llevaban a las diferentes pruebas ocultas a lo largo del recorrido.
También podía optarse por uno de los muchos talleres que se ofrecían, como el de álbumes de viajes de papel (travel books), en el que la coordinadora, Cristina Fayos, madre de una alumna, explicó cómo realizar artísticos álbumes como recuerdo inmejorable de un viaje; el de APP, es decir, aplicaciones informáticas interesantes, del que se encargó José Márquez Doblas, alumno de 2º de Bachillerato; el de baile flamenco, impartido por la madre de un alumno, Catalina Reyes; el de fotografía, a cargo de los profesores del Departamento de Geografía e Historia Rafael Mendoza y Rafael Jiménez; el de juegos malabares, impartido por el alumno de 3º ESO Javier Germán; el de radio, coordinado por Francisca Bascón, profesora de Lengua y Literatura del IES Trassierra; el de robótica, a cargo de José Antonio González Ariza, profesor de Tecnología del IES Zoco, en el que se construyeron distintos robots; el de cocina, impartido por las profesoras Cristina Castilla y María del Valle Expósito, en el que se prepararon y degustaron exquisitos postres, como tiramisú y trufas de chocolate; el de animación digital, impartido por Victoria García, profesora de Plástica del IES Trassierra, que consiguió que, mediante una aplicación de móviles y tabletas, se animaran diferentes objetos, como figuras de plastilina realizadas por el alumnado participante; el de pintura mural, coordinado por la profesora de Plástica Mª Teresa Palomo, en el que el alumnado de 2º de Bachillerato decoró una pared exterior con un gran mural diseñado por Ismael Cobacho Márquez, alumno de 2º de Bachillerato, donde están representadas las distintas asignaturas que se imparten en el instituto; el de videojuegos, organizado por el alumnado de 4º de ESO; o, para terminar variada oferta, el taller de dance-hall, a cargo de la alumna de 4º ESO Candela Rey Beltrán.
Como en años anteriores, tuvo gran aceptación el concurso Tu cara me suena, en el que diferentes alumnos y alumnas actuaron como en el programa de televisión, imitando a cantantes famosos.
Se instalaron tres exposiciones: una sobre personajes solidarios, con trabajos realizados por el grupo de alumnos de Literatura Universal de 1º de Bachillerato; otra con eslóganes solidarios creados por el alumnado de 1º de Bachillerato, uno de los cuales ilustró la pancarta colocada en el hall de entrada, y una tercera con los trabajos presentados al concurso “Solidaridad” de poesía y relato, con tema solidario. Se otorgaron dos premios de poesía y dos de relato en dos categorías diferentes, ESO (a Irene Durán y Gabriel Montilla) y Bachillerato (a Sara Lucena y Ana Sevilla).
Fotografía ganadora, de Andrea Barra.
En cuanto al concurso de fotografía solidaria, el premio recayó en Andrea Barra, de 1º de Bachillerato.
Pero esto no fue todo. A lo largo de la mañana y de los días anteriores, se realizaron salidas para visitar centros solidarios y colaborar con ellos durante unas horas, como APROSUB, ASAENEC, FEPAMIC, el banco de alimentos, APIC y el centro social Rey Heredia.
En resumen, fue una jornada festiva en la que todos colaboramos juntos para hacer un mundo un poco más solidario.
(Redactado por Joddy Erazo Vera y Pilar Melgarejo Navajas, de 1º de Bachillerato D).
El trabajo que realizáis es EXCEPCIONAL. Este año habéis decidido ceder los fondos solidarios recaudados con vuestras actividades a las Enfermedades Raras. Como presidenta de la Asociación más activa de Córdoba os doy las gracias de corazón en nombre de todas las familias afectadas y sobretodo en nombre de los más pequeños afectados por patologías minoritarias.
Esperamos seguir en contacto con todos vosotros y trasmitiros e informaros más sobre el sufrimiento de la problematica de las enfermedades raras en una familia cordobesa.
Existen más de 40.000 Cordobeses afectados sólo en nuestra provincia.
Por favor, seguir con esta solidaridad hacia aquél que lo necesita sin más agradecimiento que el sentirse útil hacia el otro.
GRACIAS
Rosa García del Rosal
Presidenta REMPS y Federación CRAER